
México enfrenta una intensa ola de calor en mayo de 2025, con temperaturas que superan los 45 °C en varias regiones del país. Este fenómeno, impulsado por un sistema de alta presión que reduce la nubosidad y aumenta la radiación solar, ha generado niveles elevados de calor tanto diurnos como nocturnos. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha emitido alertas para múltiples estados, destacando la gravedad de la situación.
Los estados más afectados incluyen Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Michoacán y Guerrero, donde las temperaturas han superado los 45 °C. En Ciudad de México, se esperan temperaturas máximas entre 30 °C y 35 °C hasta el 18 de mayo. Estas condiciones extremas han llevado a las autoridades a recomendar precauciones adicionales para la población.
El cambio climático ha intensificado la frecuencia y severidad de las olas de calor en México. Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han alertado que el país se está calentando a un ritmo de 3.2 °C por siglo, superando el promedio mundial de 2 °C. Este aumento de temperatura agrava los riesgos para la salud y el medio ambiente.

Las autoridades han confirmado al menos cuatro muertes relacionadas con golpes de calor: dos en San Luis Potosí y dos en Veracruz. Los síntomas de golpe de calor incluyen piel seca y caliente, sudoración excesiva, mareos y náuseas. Es fundamental prestar atención a estos signos y buscar atención médica inmediata en caso de presentarlos.
En regiones como Tierra Caliente, Michoacán, las temperaturas pueden alcanzar hasta 53.3 °C, como se ha registrado en municipios como Tepalcatepec. Estas condiciones extremas requieren medidas adicionales para proteger a la población y garantizar su bienestar.
La ola de calor también ha tenido impactos en la infraestructura y el suministro de agua. La escasez de agua es un problema creciente, con cortes en Ciudad de México desde 2022 y disturbios en el norte del país. El 93% de los mexicanos exige políticas más estrictas para enfrentar esta crisis.
Ante esta situación, es crucial que la población siga las recomendaciones de las autoridades y tome medidas para proteger su salud y bienestar. La colaboración de todos es esencial para enfrentar los desafíos que presenta esta ola de calor y mitigar sus efectos en la sociedad.

¿En qué estados de México hará mucho calor?
Los estados que enfrentarán las temperaturas más altas, entre los 40 y 45 °C, son Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Zacatecas (sur), Durango, Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Morelos, Querétaro (norte), Hidalgo (norte), Puebla (norte y suroeste), Oaxaca, Chiapas (norte), Veracruz, Tabasco, Campeche y Yucatán.
Otros estados como Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Aguascalientes, Colima, Guanajuato, suroeste del Estado de México y Quintana Roo registrarán temperaturas entre los 35 y 40 °C. Incluso en la Ciudad de México y Tlaxcala, donde el clima suele ser más templado, se esperan máximas de entre 30 y 35 °C.
¿Qué medidas tomar para combatir las altas temperaturas en México?
Ante la intensa ola de calor que afecta a México, con temperaturas que superan los 45 °C en estados como Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y Guerrero, las autoridades de salud han emitido recomendaciones para proteger a la población. Se aconseja evitar la exposición directa al sol entre las 11:00 y las 16:00 horas, mantenerse hidratado, usar ropa ligera y de colores claros, y protegerse del sol con sombreros o gorras. Además, se recomienda no dejar a personas o animales dentro de vehículos cerrados, ya que las temperaturas pueden elevarse rápidamente y representar un riesgo mortal.
Las altas temperaturas pueden provocar golpes de calor, deshidratación e insolación. Los síntomas incluyen fiebre superior a 40 °C, confusión, piel enrojecida y seca, náuseas y desmayos. En caso de presentar estos signos, es crucial trasladar a la persona a un lugar fresco, hidratarla y buscar atención médica inmediata.
Para mantener los hogares frescos durante la ola de calor, se recomienda cerrar persianas y cortinas durante el día para bloquear la entrada de calor, y abrirlas por la noche para permitir la ventilación. Utilizar ventiladores, evitar el uso de electrodomésticos que generen calor, y optar por iluminación LED puede ayudar a reducir la temperatura interior.
Es fundamental prestar atención especial a grupos vulnerables como niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas. Además, se debe evitar realizar actividades físicas intensas durante las horas de mayor calor y consumir alimentos frescos y ligeros. La colaboración de la comunidad y la difusión de estas recomendaciones son esenciales para prevenir riesgos y proteger la salud durante esta temporada de calor extremo.